Soy Gema Villalba
... y voy a ser sincera.
He metido la pata unas cuantas veces en mi vida, sobre todo en lo profesional.
He ayudado a facturar y, lo más importante, a recuperar su sonrisa muchas a personas, pero… no me sentía satisfecha. A pesar de que los pacientes me valoraban, sabía que las cosas se podían hacer mejor. Ya sabes: donde hay patrón no manda marinero.
Así que, por razones que te contaré en persona cuando nos veamos, decidí dar un cambio radical y ser valiente. Y aquí estoy, empezando un nuevo camino… un camino que quiero compartir contigo.